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¿De verdad se puede aprender un idioma con una aplicación? Esto es lo que averigüé

¿De verdad se puede aprender un idioma con una aplicación? Esto es lo que averigüé

Para mí, aprender un nuevo idioma es más que pedir direcciones en mis próximas vacaciones (¡aunque también eso es importante!). La tecnología está ayudando a las industrias a globalizarse más rápidamente, creando oportunidades comerciales para la gente que puede conversar en varios idiomas.

Sin mencionar que desde una perspectiva social, las redes sociales y el Internet ayudan a conectar a los seis mil millones de personas de todo el mundo, a hablar más de seis mil idiomas diferentes, de manera que la cultura, el arte y la música que tienen una influencia en nuestras vidas son más internacionales que nunca. En el mundo moderno actual, necesitas hablar varios idiomas para mantenerte al día. Así que cuando tuve la oportunidad de ir a un viaje de negocios a España para una conferencia internacional, pensé que debería aprovechar la oportunidad para finalmente aprender un segundo idioma.

Uno de mis compañeros de trabajo me dijo que estaba usando Rosetta Stone para aprender español antes del viaje, pero yo no estaba seguro si una aplicación para aprender idiomas me sería útil. Tenía mis dudas al acordarme que aprender un idioma en la escuela tomaba mucho tiempo y energía. Recuerdo tener que memorizar listas de palabras de vocabulario con tarjetas, y después de horas aburridas de estudiar, todavía se me olvidaban algunas palabras. Lo odiaba.

Pero mi compañero me dijo que después de usar la aplicación Rosetta Stone en su teléfono durante dos semanas, ya podía decir con naturalidad frases en español en una conversación. Me dijo que las lecciones solo duran de 15 a 30 minutos, así que no le quita mucho tiempo. Aunque estoy muy ocupado, pensé que tengo un poco de tiempo para dedicar a aprender un idioma. Además, la aplicación tiene un período gratuito de tres días y el costo de las suscripciones empieza en $150 al mes, así que decidí probarla.

Descargué la aplicación y decidí tomar las lecciones breves en mi hora de comida en la oficina. En realidad solo me tomó de 15 a 30 minutos y fue una buena distracción del trabajo. A diferencia de las clases que odiaba en la escuela, la aplicación Rosetta Stone se enfoca en aprender conversaciones, lo cual significa que estaba aprendiendo a hablar usando frases que uso todos los días. Para mi sorpresa, después de unos días me di cuenta de que en realidad estaba absorbiendo y aprendiendo las lecciones. Además, me di cuenta de que mi acento y pronunciación mejoraban cada día.

Después de un mes, fui a un restaurante español de mi localidad y platiqué con el dueño. Hablamos un poco de su familia y de cuáles son sus platos favoritos que cocina. Me impresioné al poder entender lo que decía y me impresioné todavía más al sentir una seguridad natural al hablar español, nunca me puse nervioso pensando que decía algo incorrecto o que sonaba mal.

Me sorprendí al descubrir todas las increíbles funciones que tiene la aplicación. Una de ellas es Phrasebook, que le dice cómo pronunciar las frases más comunes para viajar, como "¿Dónde estoy?" y "¿Cómo puedo encontrar el autobús?" Pero mi función favorita es Seek & Speak, un programa que usa el reconocimiento de objetos y el aprendizaje automático para enseñarle las palabras de los objetos a su alrededor.

Funciona así: está en su escritorio y quiere saber cómo decir "bolígrafo" en el idioma que está aprendiendo. Empieza un desafío (como "Listo para la clase"), toma una fotografía de cualquier bolígrafo, la aplicación reconoce el objeto y le enseña la palabra bolígrafo en español ( ¡bolígrafo!). Las funciones me dieron mucha seguridad para ir a España, sabiendo que tengo una herramienta en mi bolsillo que me ayudará a hablar con los residentes locales, incluso si me siento frustrado y no puedo recordar las palabras correctas.

Nunca pensé que una aplicación podría ayudarme a aprender un idioma, pero después de dos meses de usar Rosetta Stone, me fui al viaje de negocios a España y fui el conversador más seguro de todos mis compañeros. Sigo aprendiendo español incluso después de mi viaje porque Rosetta Stone lo hace muy práctico y ahora siempre soy la persona que la empresa elige para ayudar a hacer negociaciones en los países de habla hispana. Entre el desarrollo profesional y poder mantenerme en contacto con los amigos de mis viajes, aprender a hablar un segundo idioma me ha ayudado a tener una vida gratificante y feliz.

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